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Una Revelación del Espíritu Santo

8 de diciembre 2025

Una Revelación del Espíritu Santo

El Espíritu Santo nos Revela 7 cosas que podemos hacer para vencer nuestra propia voluntad.

“Por tanto, someteos a Dios. Resistid, pues, al diablo y huirá de vosotros. Acercaos a Dios, y Él se acercará a vosotros. Limpiad vuestras manos, pecadores; y vosotros de doble ánimo, purificad vuestros corazones. Afligíos, lamentad y llorad; que vuestra risa se torne en llanto y vuestro gozo en tristeza. Humillaos en la Presencia del Señor y Él os exaltará”. Santiago 4:7-10

1. Someteos a Dios 

  • Solo quienes ceden su propia voluntad pueden someterse a la Voluntad de Dios.
  •  La obediencia comienza con la renuncia personal.

2. Resistid al diablo

  • Cuando seguimos nuestra voluntad, damos lugar a los demonios.
  • Cuando resistimos nuestra voluntad, los demonios huyen.

3. Acercaos a Dios

  • El primer paso lo damos nosotros, no Dios.
  • Cuando Él ve nuestro esfuerzo extremo, Se acerca a nosotros.

4. Limpiad vuestras manos

  • Representa nuestras obras, actitudes, esfuerzos y acciones.
  • Es reconocer nuestras imperfecciones y buscar la pureza en lo que hacemos.

5. Purificad vuestros corazones 

  • Los de doble ánimo son engañados por su propio corazón:
    • Dicen que harán algo y no lo hacen.
    • Empiezan algo y no lo terminan.
    • Declaran una cosa y hacen lo contrario.
    • Necesitan ser purificados porque están sucios por hacer sus propias voluntades.

6. Afligíos, lamentad y llorad 

  • No por los problemas, sino por haber hecho nuestra voluntad en lugar de la de Dios.
  • Llorar significa derramar el alma delante de Dios, en Su Altar.

7. Humillaos en la presencia del Señor 

  • Jesús, siendo perfecto, Se humilló a Sí mismo.
  • Nosotros, siendo imperfectos, debemos humillarnos aún más.
  • Así como el Padre exaltó a Jesús, también exaltará a quienes se humillan en Su Presencia.

Observá que cada alerta de Santiago 4:7-9 es un paso para vencer nuestra voluntad y vivir en la Voluntad de Dios. El camino es claro: someterse, resistir, acercarse, limpiar, purificar, lamentar y humillarse.

Viviane y yo nos estamos preparando para llevar las peticiones de todos los Países hispanohablantes de Sudamérica al Jardín del Getsemaní, donde el Señor Jesús Oró, Lloró, Clamó y Suplicó por nosotros, para que la Voluntad del Padre prevaleciera en nuestras vidas y fuéramos Transformados en Hijos de Dios, Felices, Fuertes y Salvos.

📯¡Nos vemos en breve, en la IURD o en las Nubes!
Obispo Julio Freitas