Llegar, oír y subir: las tres batallas espirituales
Voy a describir con ejemplos las tres batallas que todo verdadero creyente enfrenta para presentarse como sacrificio vivo en el Altar del Dios Vivo:
La 1.ª batalla es llegar a la Iglesia Universal
– Batalla: vencer contratiempos, distancias, cansancio, comodidad y prejuicios.
– Acción: decidir estar en la Casa de Dios, aunque todo parezca dificultarlo.
– Resultado: cada paso hacia la Reunión ya es una victoria contra la resistencia del mal en el mundo espiritual.
“… no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre…”. Hebreos 10:25.
La 2.ª batalla es practicar lo aprendido, no basta con oír
– Batalla: superar excusas, miedos, dudas y razonamientos humanos.
– Acción: abrir la mente y el corazón para escuchar, aceptar, obedecer la Palabra y creer en los testimonios de transformación.
– Resultado: la fe se fortalece cuando se recibe la Palabra con humildad y disposición de practicarLa.
“Así que la fe viene del oír, y el oír, por la Palabra de Cristo”. Romanos 10:17
La 3.ª batalla es subir al Altar con la entrega trina
– Batalla: entregar mente, corazón y cuerpo en dependencia total de Dios.
– Acción: subir al Altar con humildad y confianza absoluta, rindiendo planes, sueños, costumbres y debilidades.
– Resultado: el Espíritu Santo Transforma al creyente en hijo del Altísimo, otorgándole una nueva vida.
“… que presentéis vuestros cuerpos como sacrificio vivo y santo, aceptable a Dios…”. Romanos 12:1
Quien vence estas tres batallas —llegar, oír y subir— experimenta la verdadera Novedad de Vida. El Altar no es solo un lugar físico, es el punto de encuentro en el mundo espiritual y sobrenatural, donde la voluntad humana se entrega y la Voluntad Divina se Manifiesta.
El desafío es claro: no basta con llegar, oír o entender; es necesario subir y rendirse por completo para ser Transformado en hijo del Altísimo.
¿En cuál de estas tres fases estás?
- Podés y debés completarlas aún este año, para iniciar el nuevo año con Nueva Vida.
No dejes de participar de la Vigilia de Año Nuevo junto a tu Familia en la Casa de Dios. Viviane y yo estaremos en la Sede Nacional de la Universal en Buenos Aires, Argentina.
¡Nos vemos en breve, en la IURD o en las Nubes!
Obispo Julio Freitas



