Fe, Esperanza Y Fidelidad

Jacob tenía fe y esperanza, pero le faltaba un tercer elemento: fidelidad.

Muchas personas tienen fe y esperanza, pero les falta fidelidad; ¿fidelidad a quién? A Dios.

Jacob no tenía ni una almohada, él hizo de una piedra su almohada y Dios le reveló que no estaba solo, que estaba con él, que los ángeles Divinos estaban con él. Dios sabía las luchas que Jacob enfrentaría, por eso Se anticipó y envió a Sus ángeles. Recueste su cabeza sobre la piedra que es la Palabra de Dios, que es Jesús; haga de la Palabra de Dios su almohada, piense en las cosas de Dios. Evite ver noticias que no suman nada a su vida; vea programas que lo eduquen, que aporten algo a su inteligencia, mente y vida social, que no envenenen su alma, fe y corazón. Además, vigile lo que escucha, lo que ve e incluso lo que dice.

Cuando Jacob se despertó, tomó la roca que usó como almohada y derramó aceite sobre esta, diciendo:

«… Esto no es más que la casa de Dios, y esta es la puerta del cielo», Génesis 28:17.

Llamó a ese lugar Betel, puerta del cielo, y dijo:

«Y esta piedra que he puesto por señal será casa de Dios; y de todo lo que me des, Te daré el diezmo», Génesis 28:22.

Él no tenía nada ni a nadie, solo tenía fe y esperanza, no obstante, le faltaba una cosa para tener la trinidad que hace que suceda lo sobrenatural: FIDELIDAD.

Cuando Jacob hizo el voto de ser fiel a Dios, comenzó a prosperar y todo lo que hacía le salía bien, porque el Altísimo le abrió las puertas; mientras que sus primos, ignorando la acción de Dios, envenenaban a su tío contra él, a causa de su prosperidad.

• El voto de Betel no es esperar que las cosas y las personas cambien, sino comenzar a practicar la Palabra de Dios.

El que es fiel a Dios no camina solo, porque el Altísimo lo bendice de manera sobrenatural.

• El voto de Betel es dejar de lamentarse y murmurar para empezar a visualizar su vida transformada y prosperada.

Increméntele esperanza a su fe y fidelidad a su esperanza. No renuncie a esas tres cosas, porque, para la gloria de Dios, verá que los caminos se abrirán delante de usted.

• El voto de Betel es dejar de culparse por los errores que cometió y empezar a hacer lo que es correcto a los ojos de Dios.

Obispo Júlio Freitas
¡Nos vemos en la IURD o en las Nubes!

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