No trabajaremos en vano

Una de las peores frustraciones que puede experimentar el ser humano es trabajar en vano:  
– Trabajar para que otros se beneficien.  
– Construir para que otros habiten. 
– Plantar para que otros cosechen.  

Pero este no es el Plan ni la Promesa de Dios para Su pueblo. 
Él Prometió que quienes Lo sirven con fidelidad, generosidad y confianza disfrutarán del fruto de sus manos, y no serán avergonzados.

Esta Promesa es Viva y es para vos

“Construirán casas y las habitarán, plantarán viñas y comerán su fruto. No edificarán para que otro habite, ni plantarán para que otro coma; porque como los días de un árbol, así serán los días de Mi Pueblo, y Mis Escogidos disfrutarán de la obra de sus manos. No trabajarán en vano, ni darán a luz para desgracia, porque son la simiente de los Benditos del SEÑOR, ellos y sus descendientes con ellos”. Isaías 65:21-23

Esta es una Promesa para los que creen, obedecen y se suman a los Propósitos del Reino.

Quiero invitarte a participar estos próximos Domingos de primavera del Floreceré, un Propósito de Fe basado en estas Promesas.

Ese día, contribuiremos con nuestras oraciones y ofrendas voluntarias para:  
– El mantenimiento de los templos propios y alquilados de la Iglesia Universal.  
– La construcción de la Catedral de Mi Familia en La Plata, y en toda Argentina.  

No se trata de insistir ni de pedir  
– Se trata de propósito.  
– Quienes creen en esta visión pueden incluir en su contribución el proyecto o el trabajo en el que están actualmente involucrados, para que sea presentado ante Dios y completado con éxito durante estas próximas semanas de primavera.

“Por tanto, mis amados hermanos, estad firmes, constantes, abundando siempre en la Obra del Señor, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano”. 1 Corintios 15:58

Lo que se planta con fe se cosecha con honra

• Dios no permitirá que Su Pueblo trabaje en vano. 
• Él honra la fe en acción, la obediencia y la visión. 
• Y todo lo que se construye para Su Gloria será habitado, disfrutado y multiplicado por los Benditos, es decir, los Escogidos del Señor.

¡Avancemos con fe y fidelidad!

Dios está y cuenta con vos, y yo también.

Obispo Julio Freitas 
¡Eia!